jueves, 15 de octubre de 2009

Cambio climático y "Consumir menos, vivir mejor"

Hoy se celebra internacionalmente el día Blog Action Day. Se trata de que un día al año los bloggers del mundo escribamos sobre un tema central para llamar la atención sobre el mismo. Este año se trata de poner de relieve el cambio climático, dado que en breve habrá una importante reunión en Copenhague donde algunos de los líderes y gobiernos mundiales van a intentar tomar algunas decisiones que afectaran a la humanidad entera. Mucha responsabilidad.
Es por ello que me he decido, ante mi incredulidad sobre las promesas políticas, pasar a la acción ciudadana. Es decir, ¿qué podemos hacer las personas de a pié para no seguir destruyendo nuestro planeta, y por consiguiente a nosotros y nosotras mismos?

Investigando un poco por la red he podido encontrar varios libros muy interesantes. Uno ya lo cité en mi post anterior: "El libro negro de las marcas". Con este libro de investigación dos periodistas alemanes quisieron poner sobre la mesa las políticas que muchas empresas siguen teniendo, vulnerando derechos humanos y de la infancia, entre otros. Tal vez más adelante le dedique más tiempo a este libro.

En esta ocasión quiero comentar un libro que me ha parecido muy interesante por muchos motivos. Se trata de "Consumir menos, vivir mejor. Ideas prácticas para un consumo consciente" de Toni Lodeiro. Como su autor lo describe perfectamente paso aquí a poner la reseña:

"Vivir con menos no sólo es necesario para contruir un mundo más solidario y sostenible, también puede ser una manera de hacer nuestro día a día más relajado y satisfactorio, más gozoso y saludable.

En esta aventura que supone bajar el ritmo nos toca nadar “a contracorriente”, y nos encontramos a menudo solas e incomprendidas, a veces hasta saboteadas. Otras veces nos falta información, tiempo, dinero… No siempre es fácil hacer las cosas como nos gustaría…

Estas páginas quieren serte útiles para hacer más fácil este camino y para acercarte a gente con quien compartirlo. Para ello están cargadas de en información y reflexiones y, sobre todo, de montones de ideas prácticas, y de experiencias y contactos (teléfonos, webs, libros) de personas y grupos. Eso sí, las prácticas corren de tu cuenta ¡Que las disfrutes!".


El libro es totalmente práctico y por lo tanto repleto de ideas para poder aplicar en nuestro día a día. Nos anima a hacer un consumo más responsable, como dice el autor: "Ideas para comer, vestirnos, lavar y lavarnos,comprar, informarnos, divertirnos, viajar, educarnos, usar el ordenador, invertir nuestros ahorros… en definitiva, vivir… de manera más saludable y ecológica". Por ejemplo ahora mismo mientras escribo esto estoy disfrutando de un rico cacao de comercio justo (Fairtrade), aunque sobre el comercio justo hay mucho que hablar así que escribiré otro post sobre ello.

Tiene como valor añadido que lo puedes encontrar, además en las librerías, en su página web para descargarlo de forma gratuita ya que el autor lo ha publicado con una licencia de copyleft.

Hoy día más que nunca hay que empezar a crear cambios en nuestra forma de consumo y muchas veces los consumidores no sabemos qué hacer para no seguir dañando tanto el clima como los derechos humanos. Libros así hacen que se haga más fácil conocer esas formas de hacer un consumo más responsable, ético y sostenible. Los grandes cambios de la humanidad al fin y al cabo han sido desarrollados por el pueblo, por la gente, y somos precisamente la ciudadanía la que debemos empezar a generar el cambio en esta ocasión. Somos las personas de a pié las que debemos exigir los cambios y presionar a políticos, gobiernos y empresas para que las generaciones futuras puedan seguir disfrutando de este maravilloso planeta, con respeto a la madre naturaleza y con respeto por todas las formas de vida, además de respetar los derechos humanos en cada rincón del mundo.

Aquí dejo unos links sobre el libro y un vídeo de su autor:

http://www.nodo50.org/consumirmenosvivirmejor/


Libro "Consumir menos, vivir mejor"
(descarga legal y gratuita)





sábado, 10 de octubre de 2009

¿Cómo acabar con la pobreza?

La ONU inició en el año 2000 una campaña para la erradicación de la pobreza extrema, entre otros temas, en el 2015. En la cumbre donde se inició dicha campaña 189 países y gobiernos del mundo subscribieron dichos propósitos, contando con la colaboración de ONG's, plataformas nacionales e internacionales de la sociedad civil y entidades gubernamentales. Los objetivos del milenio, como se los conoce, son:

  1. Erradicar el hambre en el mundo.
  2. Educación primaria universal.
  3. Igualdad de género y autonomía de la mujer.
  4. Salud infantil reduciendo su mortalidad.
  5. Salud materna.
  6. Combatir el VIH/SIDA.
  7. Medio Ambiente sostenible.
  8. Alianza global.
Cada año el mundo levanta sus voces para reclamar la consecución de dichos objetivos que firmaron todos estos países y es por ello que desde el 16 al 18 de octubre en muchas ciudades del mundo se van a realizar actividades y campañas de información, concienciación y, sobre todo, reclamo de dichos objetivos. Una forma de que la ciudadanía recuerde a gobernantes y demás organismos que dichos objetivos están muy lejos de cumplirse y no queda tanto tiempo para el 2015.
Incluso hay grupos musicales en España que se han unido para animar a la gente a reclamar el fin de la pobreza, una forma de concienciar más, sobre todo a la gente más joven.

¿Pero realmente qué hay detrás de esos objetivos? ¿Es suficiente lo que se está haciendo para acabar con la desigualdad y el sufrimiento de tantos millones de personas en el mundo? Se me ocurren muchas preguntas al respecto. La ONU, como ya sabemos, no es más que un órgano casi consultivo el cual tiene más bien poca voz en muchos asuntos. Propone pero no dispone, es cada gobierno el que tiene que hacer y deshacer en su propio país. Y ahí es dónde falta la voluntad, porque quedar frente a la comunidad internacional como un país con buenas intenciones a la hora de firmar campañas, compromisos y demás es una cosa, y otra muy diferente ser coherente, consecuente y actuar acorde a aquello con lo que te comprometiste. Las palabras sean escritas o habladas pueden ser un poema precioso de buenas voluntades pero que si no se trasforman en acción no sirven de nada y son pura demagogia.
Lo mismo se puede aplicar al resto de la ciudadanía, es decir está muy bien una vez al año decir yo no quiero que personas en el mundo sufran, pasen hambre o mueran sin tener por qué. Pero la cuestión es que es mucho más útil que se cambien actitudes diarias en nuestras rutinas que ponernos una chapa, una pegatina, un cartel o hacer una canción varios días al año y pensar que somos muy buenos ciudadanos y ciudadanas, somos muy responsables para con los demás y ya hasta el año siguiente.
Se pueden hacer muchas cosas para ayudar a la consecución de los objetivos. Pero eso pasa por cambiar hábitos, hacer un consumo responsable, ser más respetuosos día a día con el medio ambiente, reclamar a nuestros gobiernos políticas internacionales más justas y respetuosas con terceros, un largo etcétera que con un poco de tiempo y constancia pueden ir cambiando cosas.

Todas las acciones cuentan por supuesto y está bien hacer cosas aunque sea una vez al año, pero lo que más cuenta y hace el ser conscientes, informarnos, intentar actuar día a día de forma responsable para con la humanidad.

Que España firmara la consecución de los objetivos del milenio y siga vendiendo armas a países en los que no hay siquiera democracia, hay conflictos armados atroces o tienen políticas que dejan mucho que desear, no es una buena forma de consecución de los objetivos del milenio. Además de ser un país con un millón de personas analfabetas, donde la pobreza cada vez tiene más cara de niñ@ y mujer, donde las mujeres ganamos bastante menos que los hombres y aún hemos de elegir entre nuestras vidas académicas/profesionales y nuestra vida familiar, siendo uno de los países de la unión europea que menos recicla.

No se trata de ser negativa o de tirar por tierra el trabajo que se hace, pero es el dejar de ponernos medallas, y mirar de verdad de forma objetiva y sincera sobre lo que no hacemos y podríamos hacer, que es mucho, para cambiar la situación de injusticia social en la que nos encontramos dentro y fuera de nuestro país. Y sobre todo reclamar a nuestros gobiernos de forma activa y constante que hay que hacer nuevas políticas nacionales e internacionales para que esos objetivos sean una realidad, además de como ciudadanía ser más conscientes actuando de forma responsable en nuestro día a día.

Quien quiera informarse por ejemplo sobre la ética de ciertas empresas puede consultar aquí:

El libro negro de las marcas