Se agolpan un montón de recuerdos de mi niñez acompañados por un nombre, Víctor Jara. Es algo que ocurre hoy al leer la noticia de que por fin van a poder darse sepultura a los restos del cantautor chileno de una forma digna.
Víctor Jara fue además de un gran cantautor, un luchador contra la dictadura de Pinochet en Chile. Y fue esa lucha la que le llevó a ser secuestrado, torturado y asesinado de forma vil por los militares del régimen dictatorial. En el momento de su muerte sólo lo acompaño hasta la sepultura su viuda y un amigo, pero mañana 36 años después de su terrible asesinato podrá ser enterrado con la compañía de su familia, amigos y de un pueblo entero, miles de personas para las que Víctor Jara es un símbolo de la lucha contra la dictadura.
Como escribía esta mañana Joan Manuel Serrat: "A quien dice: Dejad en paz a los muertos, les respondo: ¿están los muertos en paz? ¿Estamos en paz con ellos?".
Son muchas las heridas que siguen abiertas en Chile, al igual que en España, y aunque haya personas que quieran invisibilizarlas es necesario ponerlas de manifiesto. Y sobre todo es necesario que se haga justicia para con los muertos. Que sus criminales no queden impunes ante tantos actos deleznables cometidos al amparo de un régimen dictatorial y que sus restos puedan descansar dignamente en lugares apropiados.
Desde este pequeño rincón mi recuerdo y admiración a todas aquellas personas que perdieron la vida en pro de unos ideales de justicia, democracia y libertad.
Hasta siempre Víctor Jara!
Víctor Jara fue además de un gran cantautor, un luchador contra la dictadura de Pinochet en Chile. Y fue esa lucha la que le llevó a ser secuestrado, torturado y asesinado de forma vil por los militares del régimen dictatorial. En el momento de su muerte sólo lo acompaño hasta la sepultura su viuda y un amigo, pero mañana 36 años después de su terrible asesinato podrá ser enterrado con la compañía de su familia, amigos y de un pueblo entero, miles de personas para las que Víctor Jara es un símbolo de la lucha contra la dictadura.
Como escribía esta mañana Joan Manuel Serrat: "A quien dice: Dejad en paz a los muertos, les respondo: ¿están los muertos en paz? ¿Estamos en paz con ellos?".
Son muchas las heridas que siguen abiertas en Chile, al igual que en España, y aunque haya personas que quieran invisibilizarlas es necesario ponerlas de manifiesto. Y sobre todo es necesario que se haga justicia para con los muertos. Que sus criminales no queden impunes ante tantos actos deleznables cometidos al amparo de un régimen dictatorial y que sus restos puedan descansar dignamente en lugares apropiados.
Desde este pequeño rincón mi recuerdo y admiración a todas aquellas personas que perdieron la vida en pro de unos ideales de justicia, democracia y libertad.
Hasta siempre Víctor Jara!
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